Una de las cosas que más me apasionan de mi trabajo como periodista es el contacto con las personas, conocer sus historias y darlas a conocer. Lamentablemente esta historia (de refugiados) cuenta el momento más triste de una persona. Cuando pierde su casa, su hogar, su familia, amigos, su país… Cuando incluso pierde a sus seres queridos y es despojado de la dignidad que debe acompañar al ser humano.
Les llaman refugiados, pero en realidad han vivido concentrados en un territorio, al norte de Grecia, tras huir de la guerra del país que le vio nacer.
En este vídeo os cuento el relato de algunos de esos «refugiados» que llegaron a Grecia tras pagar una elevada suma económica, y que luego, aquí, en la llamada Europa, vieron cómo sus sueños se desvanecían. Hacinados en los campos, atrapados frente a la frontera de Macedonia, abandonados por los mandatarios políticos, sufrieron vergüenza y reclamaron que se les tratara como lo que son, como lo que somos todos, seres humanos.
Sólo algunas ONG como Médicos sin Fronteras, Save the Children, Bomberos en Acción o del Equipo de Rescate de de Emergencias de Catalunya (entre otras con presencia en Grecia), hacían más llevadero el día a día de los refugiados, aportando alimentos, atención sanitaria y de higiene.
Las historias que aquí se cuentan han sido grabadas por el filmmaker Paco Sanchis.